Imagen: carrielu
Hace poco más de 1 año que nos juntamos por Skype 4 blogueros que nos conocíamos apenas por lo que escribíamos en nuestros blogs y un par de correos que habíamos intercambiado con el objetivo de crear la primera comunidad de blogs en Colombia. En ese momento, nos dimos cuenta de que  no había absolutamente nada. Existían unos pocos blogs regados por ahí, cada uno intentando crecer por cuenta propia y sin ayudar a nadie con proyectos similares. Antes de eso, sin embargo, las veces que llegó a nosotros alguien pidiendo ayuda sobre un asunto que conocíamos bien relacionado con blogs, lo ayudamos. En mi caso, de ahí surgieron guías que todos los que quieran entrar en la blogósfera deberían leer, como la de SEO orientado a blogs, cómo hacer Link Building o la que estaba dirigida a quienes trabajaban en relaciones públicas y se dirigían a nosotros los blogueros. Esas son solo algunas de las veces en que constribuí dentro de esta comunidad que ni siquiera existía en esa época y hoy apenas sigue siendo una idea intentando surgir.

Mientras eso pasaba, diarios como El Tiempo o El Espectador, entre otros en Colombia, estrenaron en los últimos años secciones de «blogs» en las que cualquiera les escribía gratis. Decir que uno tenía un blog en un gran medio parecía gran cosa. De cualquiera manera, si algo bueno salía de eso, el autor iba a tener «reconocimiento», y en el mejor de los casos las publicaciones iban a ser compartidas supuestamente en las redes sociales de esos medios. 
Escribir en un blog de estos era el camino fácil para lo que a algunos nos tomó 10 años (7 en mi caso hasta hoy). Quiero decir, tener una audiencia grande decente significativa gente que lo leyera a uno es quizás una de las razones por las que hoy muchas personas se resisten a abrir o al menos a mantener un blog. Casi todos acaban abandonados. En cambio, si un medio de comunicación grande dice poner la audiencia, por supuesto todos van a correr detrás, y de eso están llenos los blogs de medios de comunicación. Estoy seguro de que detrás de ellos así como hay algunos excelentes contenidos, hay otros que no los lee ni la mamá.

De esos 2 extremos partimos en ese momento: (1) no existía una comunidad de blogs y (2) algunos de los que había lo estaban haciendo de gratis para alguien más grande. 
En ese momento —año 2014— nos juntamos Jorge Santos, Diana Garcés y Carolina Gómez. Propusimos crear una comunidad de blogs en Colombia en la que nos ayudáramos entre todos, para todos crecer más rápido a que si lo intentábamos cada uno por nuestra cuenta. Partimos de un intento de manifiesto que nosotros mismos propusimos y sugerimos que inicialmente sería una comunidad muy cerrada (hoy es un grupo secreto en Facebook). Solo podrían hacer parte personas invitadas por miembros más antiguos (nosotros 4) y que estuvieran comprometidas 100% con sus propios blogs. Eso significaba —aplicado a la realidad— que tenían que actualizar mínimo una vez al mes y que su blog tenía que haber existido al menos durante los últimos 6 meses.

La última condición —que en realidad no había forma de medir ni de comprobar si se estaba aplicando— era participar en otros blogs de la comunidad. Si bien yo lo intentaba, no sabía en cuántos lo hacía ni cuántas veces por semana esto pasaba. A veces pasaba que la interacción no se daba ni siquiera dentro del mismo blogs, sino, quizás en otros espacios como Twitter, Ask.fm o vía correo electrónico. No sé cómo sería con los otros miembros, pero así lo hacía yo. De cualquiera manera, entre los pocos miembros que fueron entrando (hoy unos 20) siempre fuimos muy abiertos y ayudamos en todo lo que pudimos en cuestión de cosas por mejorar en cuanto a contenidos y cuestiones técnicas de los propios blogs.
Si bien nunca ha habido problemas hasta ahora entre los miembros de la comunidad, de algo nos dimos cuenta hace poco. Entre otras cosas, estábamos creciendo muy despacio respecto al número de miembros y no todos estaban igual de comprometidos. Así como hay unos que participan en cuanta discusión se genera, hay otros que fueron invitados y son parte, pero que nunca llegaron siquiera a presentarse públicamente, incluso cuando en el manifiesto estaba explícito que todo aquel que se presentara recibiría un feedback por parte de los demás miembros.


Hace poco me di cuenta de todo esto y pregunté abiertamente a quien quisiera responder, y especialmente a quienes más se hacían sentir dentro de la comunidad, qué opinaban sobre el futuro de la comunidad. Le comenté incluso a Mauricio Jaramillo sobre el proyecto y nos dio su opinión. De ahí surgieron varios puntos importantes que nunca antes fueron discutidos:
  • ¿Durante cuánto tiempo el grupo sería secreto?
  • Si algún día dejara de serlo, quizás se volvería aspiracional el querer pertenecer  él.
  • ¿Qué pasaba entonces con los que aún siendo muy comprometidos con sus propios blogs dejaban de escribir un día?, ¿serían expulsados? 
  • ¿Cómo se suponía que iban a pertenecer a la comunidad los blogueros que nosotros no conocíamos y que tampoco nos conocían?
  • ¿Qué pasa con la calidad de los blogs? Si tengo un blog malísimo pero lo actualizo una vez por semana?, ¿puedo entrar a la comunidad porque conozco a alguien de dentro y me va a meter? 
Alrededor de estas cuestiones planteadas por Mauricio pregunté dentro del grupo. La idea era que con esta autocrítica reformáramos nuestro manifiesto, las normas y, por supuesto, el futuro de la comunidad.

Algo de lo que nos dimos cuenta era que el grupo no podría continuar siendo secreto para siempre. Si bien la idea es buena para filtrar y que no entre cualquiera, así no íbamos a crecer nunca. De ahí mi constribución para que por medio de este post alguien más nos conozca. Los que algún día quieran pertenecer a nuestra comunidad, tendrán que trabajar en sus propios blogs, no abandonarlos y acercarse a alguno de nosotros. Todos somos muy abiertos y nos encuentran por Twitter, por correo electrónico o por los comentarios de nuestros propios blogs. La idea en este momento es que entre tres personas en forma de «consejo editorial» escojamos si cada nuevo blog que se postule puede —según unos criterios establecidos por nosotros— hacer parte de la comunidad. 
Entre lo que analizaremos serán aspectos como:
  • Si el sitio utiliza alguna plataforma de blogs (WordPress, Blogger/Blogspot, Tumblr, Medium, etc.).
  • Se actualiza, mínimo, una vez por mes.
  • Ortografía.
  • Antiguedad de al menos 6 meses.
  • Uso de enlaces internos y externos.
  • Uso de imágenes que el autor tenga derecho de usar.
  • Extensión de mínimo 1.500 palabras por cada post.
Si bien cada blog que quiera entrar no tendría que cumplir el 100% de estas normas, sería el consejo editorial el que decida quiénes cumplen o no en general con esos puntos. De esta forma nos aseguraríamos de que, de verdad, solo entran los mejores. Sería algo aspiracional y solo los unos cuantos harían parte.

Una cuestión que surgió y que tuvimos que tocar con pinzas era la de qué era un blog exactamente. ¿Qué pasaría con aquellos blogs que hablaran de pseudociencias, homeopatía, medicinas naturales o lo que sea que pusiera en riesgo la salud mental o física de una persona? Si cumplía todas las condiciones arriba mencionadas, ¿iba a poder participar de la comunidad aunque se tratara de alguien mintiendo? 
Para eso tomamos la decisión de que hubiera un grupo de personas, y no una sola como pasaba hasta ahora, la que tomara la decisión de quiénes harían parte de la comunidad. De cualquier forma, al final nos dimos cuenta, y así lo dicen investigadores en comunicación y periodismo digital (Tramell y Keshelashvili, 2005), un blog es la representación de la identidad de su autor. Si el autor de un blog cree en princesas y dragones, su blog seguramente será una representación de todas esas creencias, independientesmente de si son falsas o verdaderas. De ahí en adelante, seremos nosotros quienes decidamos si esto puede o no hacer parte de los valores que compartimos como comunidad: la ayuda mutua como medio para crear una comunidad de blogs en Colombia.

Así pues, esta es mi invitación abierta, y ya no secreta, de crear esta comunidad. Todavía tenemos mucho por hacer, pero creo que darnos a conocer desde este espacio y hacer una autocrítica de lo que ha pasado en el último año es un avance. El manifiesto (siendo corregido en este momento) lo pueden leer en este enlace y está abierto a sugerencias, tanto para quienes tienen un blog hace muchos años, como para los que están planeando abrir uno y les gustaría hacer parte de 57 blogs, que es como decidimos llamarnos. La lista (desactualizada) de miembros la encuentran en el siguiente enlace: https://goo.gl/3Hp5yi.
Pueden usar los comentarios de este blog para debatir alrededor de este tema y proponer cosas nuevas. Yo me encargaré de responder a cada uno e intentaré que otros miembros también participen.